«Donde vivas, sales de casa y en tu puerta arranca un Camino de Santiago». La frase pertenece a Jorge González Paredes. «Nacido en 1972 en la clínica Aranguren de Mazarredo», advierte este paisano, criado en la calle José María Escuza de Indautxu. Y víene bien ubicar cuna y buzón porque es el autor de “La Guía Secreta del Camino de Santiago“. Perfecta para recordamos, o descubrirnos, que existen tres vinculados a Bilbao. El del Valle de Mena, el del Norte y el Camino Olvidado. Dos no solo recorren nuestra villa. Nacen en ella. Y como cada cual tiene su encanto, historia y leyendas, empezaremos por el que pasa por el ‘botxo’.
El Camino del Norte, que suena a vía utilizada por los Stark con sus grandes lobos, es el más conocido. De hecho es Patrimonio de la Humanidad desde hace tres años. Su entrada en nuestra tierra se produce en Irún y tras recorrer Gipuzkoa pasa por Markina, Gernika, Lezama, Zamudio… hasta llegar a Bilbao por el monte Avril. «Justo delante del restaurante Kate Zaharra hay un mojón que da fe de que es camino oficial», detalla Jorge y recordamos entonces que hemos visto uno en la puerta por la que entran los coches. «Bajas Santo Domingo, sigues por Begoña, desciendes las escaleras de Mallona, atraviesas la Plaza Unamuno y sigues hasta la Catedral de Santiago-continúa y añade. De ahí pasas a Bilbao LaVieja, cruzando el Puente de San Antón, subes San Francisco, tiras por Autonomía, después Basurto, Castrejana y tiras por Kobetas».
Escucharle es más fácil que seguirle. Por suerte podemos coger aire a la sombra del precioso arbolado que, a modo de oasis, aparece ante nosotros justo antes de seguir hacia Cruces por Santa Águeda. Allí descubrimos su ermita, que podría ser buena parada y tregua. Pero no. Debemos seguir la ruta por la margen izquierda de la ría hasta llegar a Ontón y conformar que dejamos atrás Bizkaia. Ahora nos tocaría seguir moviendo las piernas hasta el destino final, pero hoy hablamos solo de las rutas que cruzan la capital. Así que nos vamos al Camino del Valle de Mena.
Tras salir del valle, continúa por Villasana de Mena, Medina de Pomar, Quintana de Valdivíelso, Cernegula, Sotopalacios y así hasta Burgos. Allí enlaza con el Camino Francés. «Quienes lo eligen recorren un total de 657 kilómetros», calcula Jorge. Pero nos insiste en que esta vía tiene mucho que ver con Bilbao. De hecho nace en la casa del santo y patrón de la villa. En la Catedral de Santiago. Título del que presume desde 1949, año en que adquirió la dignidad catedralicia. Y nos consta que es vía tan popular como frecuentada.
Algo que no sucede con ‘el Camino Olvidado’. Perfecto título para una novela de misterio. Quizá por ello nos atrae tanto. Incluso cuenta con dos nombres más. ‘Viejo’ y ‘de la Montaña’. Y todos tienen su razón de ser. Por eso, dado que comparte inicio con el de Mena, lo hemos elegido para caminarlo con ustedes. Arranca, como imaginarán, en la Catedral. De ahí parte hacia Santa Águeda, sigue dirección Balmaseda, pasa por Güeñes … «Si lo intentas situar en un mapa verás que, paralelo a ambos, discurre entre el camino del Norte y el Francés, con el que enlaza en Villafranca del Bierzo. Pasa por Reinosa, Aguilar de Campoo. Y por si fuera poco en Cistierna se cruza con el Camino Lebaniego>>, relata con esa ilusión que rezuman los enamorados del peregrinar más famoso de Occidente.
Añade que también coincide con el Camino del Salvador, ruta de León a Oviedo donde la tradición dice que «quien va a Santiago y no a San Salvador, sirve al criado y olvida al señor». Podríamos seguir, pero hasta viajando con la imaginación se agota uno. Al fin al cabo, ‘el Camino Olvidado’ supone recorrer 655 hermosos kilómetros. Si dejó de ser utilizado no fue por falta de belleza. Sino a consecuencia de decisiones reales o papales. Y de cuestiones logísticas. Pero sigue muy vivo. Demostrando al mundo que todos los caminos llegarán a Santiago, pero sólo algunos tienen la gran suerte de nacer en Bilbao.